¿Apagas la luz cuando tienes sexo?

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¿Eres de las que apagas la luz para que no vean tu cuerpo mientras tienes sexo?

¡No te sientas mal, porque hay muchas como tú! Pero si haces eso es probable que tu vida sexual no sea la que quieres o incluso sea realmente mala y te voy a explicar por qué.

Esconder tu cuerpo durante el sexo, el cerebro lo puede leer como una situación estresante. El estrés provoca la liberación de unas sustancias bioquímicas llamadas neurotransmisores, como el cortisol, la adrenalina y muchos otros, las cuales hacen que se active el sistema de alarma o emergencia y el cuerpo se prepare para “huir” o "escapar". 

El cerebro no admite estrés y placer al mismo tiempo, siempre elegirá al más fuerte y con seguridad será el estrés, si no lo sabes controlar. Por otra parte, en la sexología existe una regla de oro para alcanzar el máximo placer y es sentir y no pensar. 

Si durante el encuentro o el posible encuentro sexual tú estás pensando en tu peso, tus rollitos, las estrías, la cicatriz de la cesárea, tus senos, la celulitis... estás infringiendo la regla de oro y al hacerlo te perderás la oportunidad de vivir una experiencia sexual plena y satisfactoria. En realidad todo esto ocurre porque solemos ser nuestro mayor crítico, aunque nos digamos que no es así o que lo hacemos por lo que vaya a decir nuestra pareja. 

En su gran mayoría, los hombres no ven estas cosas, ellos solo quieren disfrutar, de manera que tu problema o tu real enemigo eres tú misma, en primer lugar y en segundo lugar probablemente seas como otras mujeres que sufren de lo mismo que tú: inconformidad con su cuerpo.

Definitivamente tu sexualidad está influenciada por cómo te sientes con tu cuerpo, si te gusta o no, si te sientes satisfecha con él o no. Mientras más lo rechaces más dificultades tendrás para desear o sentirte deseada en el terreno sexual.

Es fuerte este momento que nos toca vivir a las mujeres. Antes, las curvas y las voluptuosidades se consideraban eróticas, mientras que en la actualidad, desde hace algunos años ya, las creencias en cuanto a los cánones de belleza y los estereotipos considerados deseables están determinados en gran medida por la moda y los medios de comunicación que nos bombardean con imágenes de mujeres con cuerpos que parecen imposibles, muchas veces además producto de cirugías o de retoques en las fotografías. Esto ha llevado incluso a que mujeres pongan en peligro sus vidas en el afán de intentar parecerse a esas modelos, despreciando todo aquello que sea diferente. Pero esto no es la realidad, hay infinidad de distintos tipos de cuerpo ¿Por qué aceptar que se imponga algún patrón? No hay nada como ser libre, y aceptarte y amarte tal como eres. Eso sí, esto no quiere decir que no te cuides. 

Lo mejor es una alimentación saludable baja en carbohidratos, rica en proteínas y vegetales, acompañada de actividad física. Pero más allá de eso, tu cuerpo es único y merece ser mirado con respeto y amor. Él está diseñado para tener placer, solo tienes que recordar que para que funcione a la perfección en el sexo, debes tener siempre presente el mantra mágico: ¡SENTIR Y NO PENSAR!